¡Teresa ilumina la vida!

Puedes descargar los dibujos en este enlace

El nombre, y sobre todo, los dibujos de Mariana del Castillo son familiares a quienes nos movemos en el entorno teresiano. Sus obras sobre Teresa, llenas de color y simpatía, esconden el secreto de una vida en la que su autora se ha dejado iluminar por la mística y andariega de Ávila. Hoy, Mariana nos ofrece su testimonio, y unos dibujos de Teresa, con los que quiere festejar este gran acontecimiento que estamos celebrando de los 500 años del nacimiento de la santa. Los publicamos, con nuestra gratitud por este precioso regalo que hace a todos los lectores de La rueca y la pluma:

Hay cosas que uno tiene necesidad de compartir… y hoy yo quisiera compartirles algo de mi pasión por dibujar, por iluminar a Teresa. Empecé a dibujar cuando era pequeña.  Creo que mis primeros intentos como ilustradora “ocurrieron” muy en mi niñez. Viajábamos varias veces al año a Acapulco, un lugar de playa donde mis abuelos tenían una casa que tenía vista directa y casi privada al mar, tengo muy grabado que los colores de la puesta del sol llamaban mi atención cada atardecer, ciertamente era una vista muy privilegiada la de aquel lugar y…. considero que allí comenzó mi inquietud, mi necesidad y mi vocación para dibujar. Mis padres me daban cuadernos de hojas blancas y colores y mi papá me decía que “dibujara lo que veía, lo que me gustara, que yo lo podía hacer”.  En realidad desde que recuerdo, de lo que más tengo en casa son colores y cuadernos y lienzos blancos llenos de bocetos y de imaginaciones. ¡Hasta hoy!

A los 6 años entré al colegio de las Teresianas de Ossó en México, teníamos todos los viernes la clase de Plásticas en el colegio, además de “cartearme” a dibujos con una amiga de infancia: Marcela. Coleccionábamos nuestras cartitas, pues a mi modo de ver hoy día y a distancia y para la edad que teníamos ¡eran unas verdaderas obras de arte! Recuerdo bien que las hermanas nos daban unas hojas para colorear de la vida de Teresa de Jesús que me fascinaban, mientras coloreábamos, nos aprendíamos la vida y algunas “máximas” de Teresa como: “para siempre, siempre,  siempre”, “nada te turbe, nada te espante… solo Dios basta” y una que me encantaba: “solo el amor le da valor a todas las cosas” seguramente no comprendía del todo esas palabras y lo que significaría para mí acercarme a Teresa de esa manera.  En el “Club de Amigos de Jesús” teníamos un librito para colorear que se llamaba “Amigos” en donde se contaban historias de los que eran “amigos” de Jesús y quedaba un grande espacio en blanco para que dibujáramos las narraciones que allí se contaban. ¡Yo podía pasar horas!

Cierto que Teresa se ha ido haciendo protagonista en mi historia con el dibujo, simplemente porque ella ha estado en todos los momentos de mi vida de una manera especial. La primera Teresa que dibujé quizá fue la típica en un papel usado, sin ninguna intención. En papelillos así, a lápiz, que luego regalaba. Con algún letrero, con alguna frase de ella que me inspiraba. En el colegio, en la preparatoria, leíamos en grupo pequeño de amigas la Vida de Teresa… y era impactante para mí la cantidad de imágenes que venían a mi mente en esos momentos. Teresa entró a mi vida por los colores, por las imágenes que me evocaba leerla, me era imposible no imaginarla de muchas maneras al leerla y por el modo que ella tiene de comunicar tan lleno de imágenes y de símbolos: las flores, el jardín, las abejas, la mariposilla de alas blancas, las puertas del castillo, el camino, el ajedrez, las murallas…

Estando una vez en Ejercicios Espirituales, hice un dibujo, el primero como tal, a todo color, con la frase “Bienaventurado quien de verdad le amare y le trajere siempre cabe sí”  para una amiga muy querida, Pilar. Yo pensé que todo quedaría en el secreto del regalo, pero ella lo enmarcó y cuando lo vio Ana, otra grande amiga, me dijo: ¿no has pensado que estos dibujos se pueden popularizar más? ¿No sería genial acercar a Teresa a los demás con tus dibujos? ¿No te gustaría compartir la experiencia que tienes con Teresa por medio de tus dibujos? …A mí me puso a temblar (soy tímida) pues nunca hubiera tenido yo sola esa ocurrencia.

Así en el año 2000 salió el primer calendario. La imagen de portada fue el dibujo que yo había hecho a mi amiga primero. Nos reunimos un mini equipo a trabajar las ideas, a pensar las frases y hubo muchos colaboradores, eso ha sido muy importante: que para el calendario trabajamos muchos y en equipo.

Dibujar a Teresa ha sido una experiencia muy interior. Para hacer cada dibujo necesito “meterme” a la experiencia de ELLA, leerla,  imaginarme lo que ella quiso decir, sentirlo y luego evocar la imagen, pensar los colores, las formas, la composición, de manera que  todo pueda tener un sencillo significado. Ha habido algunos “cambios” en la fisonomía de la teresa que yo pinto. Finalmente, creo que el dibujo expresa también a la autora (en este caso yo) y es indiscutible que en todo este proceso de mi crecimiento humano y espiritual ha sido ella una grande acompañante.

Ha habido cosas que han sido fundamentales en mi proceso de iluminar a Teresa: Ella ha movido mi vida, mi corazón y mis procesos, mi vocación y mis “caídas y levantadas”, quizá mi forma de ir entendiendo la vida, a las personas, a Dios, muy interior, muy dentro de mí. Mi historia en el colegio teresiano, como “amiga de Jesús”, donde la conozco a ella como la amiga que me lleva a Él de la mano; el contacto más cercano y entrañable con las Carmelitas Descalza; mirar su vida desde lo pequeño: desde hacer galletas, cantar, compartir el locutorio y la vida sencilla, honda y alegre… (por bendiciones del destino, estuve 15 días entre las Descalzas de Venezuela (Los Chorros), en México en varios entrañables monasterios…); y por ultimo: conocer, tocar, caminar y reconocer los lugares por donde estuvo mi querida Andariega de Dios: Ávila, Alba, Medina del Campo y demás… lugares donde ella misma pisó con sus sandalias, aunque era una mujer “de a pie” como dicen.

Hoy doy gracias a Dios por los 500 años de Teresa, por su corazón vivo e inquieto. Y creo y pido a ella que durante muchos centenarios más, nos siga inspirando a los dibujantes, escultores, pintores, escritores, poetas, arquitectos, bailarines y a todos los artistas del mundo a expresar desde “lo poquito que podemos” los “muchos caminos” por los que Dios nos lleva a cada uno. Cierto: yo he coloreado muchos años a Teresa, pero la realidad es que cuando uno deja que esta grande mujer le enganche el corazón ¡ella es la que ilumina nuestra vida!

Mariana del Castillo Olvera…
Ilustradora de Teresa de Jesús

Puedes descargar los dibujos en este enlace